A todos nos debe preocupar conocer cuáles son las cualidades de un buen abogado. A otros profesionales (estamos encantados de recibiros en nuestro blog), a estudiantes… para ejercer la abogacía desde los mejores atributos. También a la ciudadanía, porque debe buscar estos rasgos a la hora de contratar un profesional que se ocupará de aspectos esenciales de su vida.
Por lo tanto, sin más preámbulo, vamos a ver cuáles son las:
Cualidades de un buen abogado
En una situación difícil, confusa o complicada, las personas y las empresas pueden encontrarse buscando desesperadamente una orientación de un profesional legal confiable y bien preparado. Un buen abogado/a tiene el potencial de tener un impacto dramático y positivo en la vida de un cliente.
Ya sea ayudándolos a superar un asunto difícil de derecho de familia, protegiéndolos contra cargos falsos o asegurando una compensación financiera justa después de un accidente, los abogados abogan por las personas durante algunos de los momentos más difíciles de sus vidas. Los abogados importan mucho a la sociedad.
Pero, ¿qué hace a un buen abogado? No es un trabajo fácil y no todo el mundo está hecho para ello. A continuación, vamos a listar lo que a nuestro criterio, determina un buen ejercicio de la abogacía. Al ser nuestro criterio, podrá compartirse o no, en la medida de cada quien, pero sirve como brújula para nuestro trabajo. Es el despacho que trabajamos para ser cada día.
Pasión por ser abogados
Los mejores abogados siempre tienen una verdadera pasión por su trabajo. Probablemente hayas escuchado clichés populares como “elige un trabajo que te guste y nunca trabajarás un día en tu vida”. Por supuesto, todos sabemos que en el mundo real no es tan sencillo.
Importa —a profesionales y clientes— reflexionar sobre cuáles son las cualidades de un buen abogado. Unos para ejercer otros para elegir
Las personas que sienten pasión por lo que hacen son más felices, más realizadas y se desempeñan mejor.
Compasión por los clientes
Compasión significa “padecer con”. El abogado que se compadece del problema que asedia a sus clientes, está más próximo a resolverlo, tiene una implicación —profesional, claro que sí— mayor. Alcanza su máxima cota profesional.
Los mejores abogados siempre tienen una verdadera pasión por su trabajo Clic para tuitearLas mentes legales más importantes en el campo casi siempre destacan la compasión y el servicio cuando ofrecen consejos a estudiantes de derecho y aspirantes a abogados. Un abogado que se compromete a representar y ayudar a sus clientes probablemente encuentre sentido y éxito en su vida profesional. Esto ya va más allá de poder vivir del ejercicio de tu profesión y encara la realidad de saber por qué te levantas cada mañana una vez conquistada la prosperidad.
Habilidades de comunicación
Los abogados son comunicadores. Se comunican con sus clientes, se comunican con otras partes del caso y se comunican con el tribunal. Su comunicación es intencional, por tanto debe ser controlada y programada para ser eficaz al servicio de sus intereses en cada momento.
Los abogados se comunican de diversas formas. En todas tienen que saber transmitir sus ideas. Tanto en la redacción legal formal, como en la conversación aclaratoria de dudas con el cliente, o la resolución general y rápida a prospectos.
Si tu abogado no se hace entender para ti, no es el adecuado.
Capacidad de Escuchar
Capacidad y disposición para escuchar. Esto marcará mucho la cualidad inmediatamente anterior. La comunicación eficaz es una vía de doble sentido
Conocimiento especializado
No vale ya el abogado todoterreno. Si bien todos los abogados comparten algunos troncos de conocimiento común, es importante saber qué ramas de especialización serán aquellas en las que profundicen hasta ser una garantía. El conocimiento legal necesario para ser un litigante corporativo efectivo es muy diferente al conocimiento legal necesario para ayudar a una pareja de Galicia a buscar una adopción.
Aunque existen otros factores, estos son a nuestro parecer cruciales.